Nov 11, 2025

Joe Levy, CEO de la firma de ciberseguridad Sophos, observa un panorama global en el que los riesgos se multiplican con la ayuda de la inteligencia artificial. "Cada canal digital -email, redes sociales o software y servicios de terceros- puede ser una vía de ataque. La inteligencia artificial amplía aún más superficie de riesgo", afirma. El directivo alerta de la convergencia entre ataques patrocinados por estados y la actividad criminal tradicional . "Es una de las tendencias más preocupantes", opina Levy, quien señala que las empresas "se enfrentan a adversarios que combinan los recursos de los servicios de inteligencia con la agilidad de las redes criminales". Levy explica que actores respaldados por gobiernos están involucrados en el robo de criptomonedas y propiedad intelectual, e incluso en fraudes a gran escala. Además, hackers jóvenes occidentales utilizan ingeniería social para eludir las defensas tradicionales. Otro riesgo en auge es la vulneración de la cadena de suministro , con ataques "sutiles, difíciles de detectar y que pueden generar efectos en cascada en diferentes industrias", señala. Agentes inteligentes Si los a tacantes utilizan la inteligencia artificial en su actividad cibercriminal , Sophos la emplea para reforzar las defensas y reducir los tiempos de detección y respuesta "de días a minutos", gracias a su capacidad para analizar "millones de señales por segundo", dice. La compañía tiene un asistente de inteligencia artificial que condensa la experiencia del equipo de operaciones de seguridad para responder con celeridad. "Además, estamos desarrollando otro más general que apoyará a los clientes en la gestión diaria de la seguridad", avanza. Lo siguiente, añade, serán agentes inteligentes orientados a tareas y objetivos, como los dedicados a la búsqueda de amenazas o la investigación de casos. Sophos también está mejorando sus modelos de detección en Android y aplicando la inteligencia artificial al análisis de registros de seguridad para aumentar la eficacia de las respuestas ante incidentes. Entre las amenazas emergentes, menciona el phishing impulsado por inteligencia artificial y los ataques de identidad como el conocido como fatiga de autenticación multifactor, en el que los delincuentes bombardean al usuario con avisos de acceso hasta que acaba aceptando uno por error. Además, el ransomware no remite . En Sophos observan que estos ataques evolucionan, y los delincuentes emplean menos tiempo para cifrar los datos de las víctimas, usan vías de entrada sofisticadas (incluso software de proveedores o socios) y amplían su radio de acción a sistemas industriales, dispositivos IoT e infraestructuras críticas. La respuesta de la compañía es CryptoGuard. Levy asegura que su tecnología bloquea variantes desconocidas y es efectiva contra ransomware que realiza cifrado remoto. El ejecutivo incide en que la mejor defensa sigue siendo "dominar lo básico", es decir, mantener los sistemas actualizados, usar autenticación multifactor y reducir la superficie de ataque. Ante este panorama global, Levy considera que las empresas deben ver la resiliencia como "una prioridad estratégica a nivel directivo y no solo un desafío tecnológico". Regulación en Europa El ejecutivo valora positivamente "los avances significativos" a nivel de regulación y financiación de Europa, con programas como Digital Europe y el Centro Europeo de Competencia en Ciberseguridad. "Contribuyen a generar mejores resultados con el desarrollo de talento, estrategias de resiliencia y protección de infraestructuras críticas", aunque cree que persisten desafíos relacionados con "la escasez de talento y la débil coordinación entre países". Por último, opina que España tiene una política "sólida" en la materia, y subraya los 1.100 millones en nuevas inversiones en ciberseguridad. Un director de seguridad virtual Sophos pertenece al fondo de capital privado Thoma Bravo, que adquirió la firma en 2020 por 3.900 millones de dólares, y la excluyó de Bolsa. Levy elude "especular" sobre la propiedad futura de Sophos o una vuelta al parqué. La compañía ha adquirido este año Secureworks por 859 millones de dólares, en su apuesta por los servicios gestionados de detección y respuesta, área de gran crecimiento debido a las necesidades de las organizaciones sin equipos propios. "La mayoría de las pymes no carecen de tecnología, sino de liderazgo en seguridad. Han invertido en buenas herramientas, pero sin la estrategia y gobernanza de un CISO no pueden aprovecharlas al máximo", opina Levy. La propuesta de Sophos es un "CISO virtual" que se apoya en la inteligencia artificial, y permite a las pymes contar con evaluación de riesgos, definición de objetivos, métricas de progreso y toma de decisiones informadas. © 2025 Unidad Editorial Información Económica S.L. 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